No te atrevas
No soy el ave dócil que acecha cálidas tierras prometidas
Ni tampoco la gélida agua desterrada de cumbres lejanas
Ni el impulsivo viento engendrado de una brisa enfurecida
Ni el astuto verano que fulmina una primavera desamparada.
Tampoco soy un pozo infinito colmado de tus amargas angustias
Ni el faro al que imploras cuando vas perdido en tus minucias
Ni la sólida roca que quiebras con tu árido sol despiadado
Como tampoco la niña a la que siempre crees haber controlado.
No me llames loca por ser a veces algo indecisa
Ni tampoco blanda por llorar cuando se precisa
No me llames bruja por no entender mis conjuros
Ni mentirosa cuando las verdades hieren tu orgullo
Soy solo un ignoto pájaro aleteando audaz contra esas ofensas
Soy cada suspiro de aliento surcando incontables fortalezas
Soy la indómita leona que en solitario mora entre mundos secretos
pero también el sosegado atardecer acunando al invierno inquieto.
No te atrevas a irrumpir en mi refugio de fantasía
Ni te atrevas a encender la cerilla del desprecio.
No te atrevas a ahogarme mientras aún respiro
Ni a marchitar mis sueños con romances impíos.
Lee y atiende bien estos versos sin urgencia
Porque mis palabras son de una sola lectura
Busca entre todas ellas la raíz de mi esencia
Y para siempre, quédate en la censura.
(Todos los derechos de autor reservados )
Comentarios
Publicar un comentario